PÁNICO EN EL ESTADIO

  Después de un tropiezo en casa frente al Hércules, el equipo volvió a la senda de la excelencia en el juego y superó a un rival serio (el Panathinaikos no lo cuento) netamente.
No me gustó el Atlético, demasiado brusco, cortando el juego a base de faltas y tampoco me gustó la actuación de sus dos extremos, Reyes y Simao, sufriendo lipotimias cuando notaban el aliento de algún jugador del